La campana de la estufa o comúnmente llamada campana extractora es un elemento clave para eliminar los humos y los olores de la cocina, pero con el tiempo puede acumular grasa y suciedad.
¿Sabías que la acumulación de grasa puede afectar negativamente el rendimiento y la eficiencia de tu campana extractora?
En este artículo, te mostraremos cómo limpiar tu campana de cocina por dentro de manera fácil y efectiva, para que puedas mantenerla en perfectas condiciones y disfrutar de una cocina siempre fresca y saludable.
Desde los materiales que necesitarás hasta los pasos a seguir, te proporcionaremos una guía completa para que puedas hacerlo tú mismo, sin necesidad de recurrir a un profesional. Sigue leyendo y descubre cómo darle el cuidado que se merece a tu campana extractora.
Por qué es importante limpiar el interior de la campana extractora
La limpieza regular del interior de la campana extractora es crucial por varias razones. En primer lugar, la acumulación de grasa y suciedad dentro de la campana puede afectar su rendimiento y eficiencia. Cuando los filtros y conductos están obstruidos con grasa, la capacidad de extracción de la campana se ve comprometida, lo que significa que no podrá eliminar eficientemente los humos y los olores de tu cocina.
Además, una campana extractora sucia puede convertirse en un foco de bacterias y gérmenes, lo que puede afectar la calidad del aire en tu hogar y potencialmente causar problemas de salud. Por último, pero no menos importante, una campana extractora limpia y funcional mejora la apariencia general de tu cocina, creando un ambiente más agradable y acogedor.
Señales de que tu campana extractora necesita limpieza
Es importante estar atento a las señales de que tu campana extractora necesita una limpieza. Estos signos pueden incluir:
- Olores persistentes: Si notas que los olores de comida persisten incluso después de haber usado la campana extractora, es probable que haya acumulación de grasa en su interior.
- Ruido excesivo: Si la campana extractora hace más ruido de lo habitual, esto puede indicar que los filtros o conductos están obstruidos con grasa y suciedad.
- Menor eficiencia de extracción: Si sientes que la campana extractora no está eliminando eficientemente los humos y los olores de tu cocina, es posible que necesite una limpieza.
Estas señales son una indicación de que es el momento de limpiar el interior de tu campana extractora para mantenerla en óptimas condiciones.
Herramientas y materiales necesarios para limpiar el interior de la campana extractora
Antes de comenzar a limpiar el interior de la campana extractora, asegúrate de tener a mano los siguientes materiales y herramientas:
- Guantes de goma: Los guantes de goma te protegerán las manos durante el proceso de limpieza y evitarán el contacto directo con los productos químicos de limpieza.
- Trapo o esponja suave: Un trapo suave o una esponja serán útiles para limpiar las superficies interiores de la campana extractora.
- Detergente desengrasante: Utiliza un detergente desengrasante o quitagrasas específicamente formulado para la limpieza de campanas extractoras. Asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante para obtener los mejores resultados.
- Agua caliente: Necesitarás agua caliente para enjuagar las superficies limpiadas y eliminar cualquier residuo de detergente.
- Cubeta o recipiente grande: Un cubo o recipiente grande te permitirá sumergir los filtros de la campana extractora para una limpieza más efectiva.
Detergente Quitagrasas para Campana
Ahora que tienes todas las herramientas y materiales necesarios, estás listo para comenzar a limpiar el interior de tu campana extractora. Asegúrate de seguir los siguientes pasos para obtener los mejores resultados.
Cómo limpiar tu campana extractora por dentro
Paso 1️⃣: Preparación
Antes de comenzar, es esencial desconectar la campana extractora de la fuente de energía para evitar accidentes. Luego, retira los filtros metálicos o de cualquier otro tipo que tenga tu campana. Estos suelen estar sujetos con ganchos o clips y se pueden retirar fácilmente. Coloca los filtros a un lado, ya que los limpiarás por separado.
Paso 2️⃣: Limpieza de los filtros
Comienza con la limpieza de los filtros, ya que son los que capturan la mayor parte de la grasa y suciedad. Sumérgelos en un recipiente grande con agua caliente y un buen chorro de detergente desengrasante.
Deja que los filtros reposen en la solución durante al menos 30 minutos. Para suciedad y grasa muy incrustadas, puedes utilizar un cepillo de cerdas suaves para frotar suavemente y despegar la suciedad.
Después, enjuaga los filtros con agua limpia y déjalos secar completamente antes de volver a colocarlos.
Paso 3️⃣: Limpieza del interior de la campana
Ahora, dirige tu atención al interior de la campana. Aplica el detergente desengrasante directamente sobre las superficies interiores o utiliza el trapo/esponja suave empapado en la solución de agua caliente y detergente.
Deja actuar el producto unos minutos para que la grasa se disuelva. Luego, frota suavemente con el trapo o la esponja para remover la suciedad y la grasa.
Para las áreas de difícil acceso, puedes utilizar un cepillo de dientes viejo o una herramienta similar que te permita llegar a esos rincones complicados.
Paso 4️⃣: Enjuague y secado
Una vez que hayas eliminado toda la grasa y suciedad, enjuaga el interior de la campana con un trapo limpio humedecido en agua caliente.
Asegúrate de retirar cualquier residuo de detergente, ya que puede dejar olores desagradables si no se enjuaga bien. Después del enjuague, seca completamente el interior de la campana con un trapo limpio y seco o deja que se airee.
Paso 5️⃣: Reensamblaje
Cuando los filtros estén completamente secos y el interior de la campana esté limpio y seco, es momento de reensamblar todo. Vuelve a colocar los filtros en su posición original y asegúrate de que estén bien fijados.
Conecta nuevamente la campana a la fuente de energía.
Paso 6️⃣: Mantenimiento regular
Para evitar la acumulación excesiva de grasa y suciedad, es recomendable limpiar los filtros de tu campana extractora regularmente, al menos una vez al mes, dependiendo del uso que le des a tu cocina. Una limpieza profunda del interior de la campana se recomienda cada seis meses para mantener su eficiencia y prolongar su vida útil.
Siguiendo estos pasos, podrás mantener tu campana extractora limpia, eficiente y libre de olores, asegurando así un ambiente más saludable y agradable en tu cocina.